Si suena la base y surje la llama, nos fundiremos en uno como Sevilla y Camas. Si eres serpiente sin escamas, rosas sin espinas por mi dama, todo corazón bajo mi ropa flama. Te acompañaré cuando escuches música en la cama, te sonreiré con mi mejor sonrisa de primera plana. Fui tentado por la manzana, me buscó la fama. 'Búscate un trabajo de verdad' me decía mi mamá, pero un hombre siempre se pone a sí mismo en lo que hace. Los niños se ponen disfraces, no se ven capaces.
Ese soy yo, el hombre, Juan es mi nombre. Todos esos que levantan las manos son mis secuaces. Disparo palabras a quemaropa, siempre vendiendo droga en disco. Tengo letras hasta en la sopa y alguna cana. Tenían ganas de rap de verdad, hice que vieran la luz y ahora comen de mi maná.
Soy el hombre, el hombre. Soy el hombre, el hombre.
Sé bien lo que sentiste, sé que te enamoré cuando me escuchaste y te decepcioné cuando me viste. ¿Sabes tú si eso me puso triste? Qué viste en mí, qué dejaste de ver. No sé cómo lo dijiste, si embestiste como un toro, repetiste como un loro
o hablaste mierda como un foro. Lo ignoro, pero
el hombre aprendió que fallar hay que hacerlo a solas, que él falló sólo porque intentó hacer carambolas.
Así que reza si vengo a por tí o disparas. Si te pillan escuchando mi mierda, diles que te explotó en la cara. Que te vas por el báter, que estoy agradecido de poder; llamar hijos de puta a todos esos rappers, porque esto es soul clap, aunque no sea el jefe. El deje blando, el sevillano y el concepto es Boom Bap. Lo voy a dejar correr, pero hay que saber que ser mi mujer es ser la primera dama del rap.
Soy el hombre, el hombre. Soy el hombre, el hombre.
Como una metralleta, tus letras son mis servilletas. Sólo el hombre convierte tus muletillas en muletas, sólo el hombre. No es una puta que pide ruido en los conciertos, sino Hai-Kido lírico en tu oído. Pero tú vas de entendido, vas de subido. Si vas detenido, has cometido un descuido. Tú no has entendido simples matemáticas de MC; escupo al micro, a tu grupo, a tus grupíes y a tí.
Así que es un secreto a voces que escribo en libro negro, que el juego del rap es para los niños precoces, es cosa de cascos y altavoces. Y el play explota si el stop hace como que no te conoce. Soy tu hombre, os pongo firmes. Me dijeron: 'quédate' cuando estaba a punto de irme, y me quedé. Puedes quedarte absorto, pero no me quedo corto si digo que no puedes hacerte el sordo, no.
Taken from AlbumSongAndLyrics.com
Soy el hombre, el hombre. Soy el hombre, el hombre.