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Cuentan que se fue, llorando bajo la lluvia,
Con una rosa en las manos, y en los ojos un dolor.
Que alguien la escucho, suplicándole a la luna,
Iba diciendo te amo, con tantos sueños de amor.
Amigo, no pienses que tu vida se termina,
Por alguien, que no le dio valor a tu cariño.
Comprendo, es dura la traición que ahora te brinda,
Recuerda que yo una vez también sufrí lo mismo.
Déjala, que se marche tranquila, tu no ves,
Que ella no es de alma buena, búscale,
Otro sendero a tu vida, no llores, que no vale la pena.
Amigo yo también sufrí, cuando me hirieron yo también lloré,
Por unos sueños que guardé en el alma, y que nunca se dieron.
Y mira que ahora soy feliz, sonrío de nuevo si encontré por fin,
Un amor bueno una mujer que me ama, le doy gracias al cielo.
Déjala, que se marche tranquila, tu no ves,
Que ella no es de alma buena, búscale,
Otro sendero a tu vida, no llores, que no vale la pena.
Cuentan que al pasar, la vieron que iba llorando,
Como borrando los sueños, como olvidando un querer.
Yo que la encontré, con esa rosa en la mano,
Que ya se había marchitado, que iba llorando también.
Amigo, yo se de una mujer que si te quiere,
Tu en cambio, la has visto solamente como amiga.
Olvida, a esa que te engañó cobardemente, y levanta
La frente que tu vida no termina.
Déjala, que se marche tranquila, tu no ves,
Que ella no es de alma buena, búscale,
Otro sendero a tu vida, no llores, que no vale la pena.
Amigo yo también sufrí, cuando me hirieron yo también lloré,
Por unos sueños que guardé en el alma, y que nunca se dieron.
Y mira que ahora soy feliz, sonrío de nuevo si encontré por fin,
Un amor bueno una mujer que me ama, le doy gracias al cielo.
Déjala, que se marche tranquila, tu no ves,
Que ella no es de alma buena, búscale,
Otro sendero a tu vida, no llores, que no vale la pena.
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Cuentan que se fue, llorando bajo la lluvia,
Con una rosa en las manos, y en los ojos un dolor.
Que alguien la escucho, suplicándole a la luna,
Iba diciendo te amo, con tantos sueños de amor.
Amigo, no pienses que tu vida se termina,
Por alguien, que no le dio valor a tu cariño.
Comprendo, es dura la traición que ahora te brinda,
Recuerda que yo una vez también sufrí lo mismo.
Déjala, que se marche tranquila, tu no ves,
Que ella no es de alma buena, búscale,
Otro sendero a tu vida, no llores, que no vale la pena.
Amigo yo también sufrí, cuando me hirieron yo también lloré,
Por unos sueños que guardé en el alma, y que nunca se dieron.
Y mira que ahora soy feliz, sonrío de nuevo si encontré por fin,
Un amor bueno una mujer que me ama, le doy gracias al cielo.
Déjala, que se marche tranquila, tu no ves,
Que ella no es de alma buena, búscale,
Otro sendero a tu vida, no llores, que no vale la pena.
Cuentan que al pasar, la vieron que iba llorando,
Como borrando los sueños, como olvidando un querer.
Yo que la encontré, con esa rosa en la mano,
Que ya se había marchitado, que iba llorando también.
Amigo, yo se de una mujer que si te quiere,
Tu en cambio, la has visto solamente como amiga.
Olvida, a esa que te engañó cobardemente, y levanta
La frente que tu vida no termina.
Déjala, que se marche tranquila, tu no ves,
Que ella no es de alma buena, búscale,
Otro sendero a tu vida, no llores, que no vale la pena.
Amigo yo también sufrí, cuando me hirieron yo también lloré,
Por unos sueños que guardé en el alma, y que nunca se dieron.
Y mira que ahora soy feliz, sonrío de nuevo si encontré por fin,
Un amor bueno una mujer que me ama, le doy gracias al cielo.
Déjala, que se marche tranquila, tu no ves,
Que ella no es de alma buena, búscale,
Otro sendero a tu vida, no llores, que no vale la pena.