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Ahí vas con el mismo cuento
que no te dedico tiempo,
que nomas te busco cuando
tengo ganas de tu cuerpo,
que quisieras olvidarme,
pero sabes que nadie
podrá superar mis besos.
Dices que no te quiero
mientras por ti me muero
pero no puedo hacer pues
ella llego primero, tú bien sabes
que te adoro no puedes culparme solo
de algo que los dos sabemos.
Que no llegamos ni a la cama
cuando rompes mi camisa
pues ya no aguantas las ganas
de que yo te de caricias.
Que te pones como loca
cuando mis manos te tocan
y mis besos te provocan
una y otra fantasía.
Eres tú la que me llama y
dices que me necesita
aunque siempre llegas,
te hago terminar mansita
pues te doy lo que te gusta
hasta que dobla las manitas.
Y voy a seguir pecando con tu cuerpo
mamacita, mientras tu me lo permitas.
Que no llegamos ni a la cama
cuando rompes mi camisa
pues ya no aguantas las ganas
de que yo te de caricias.
Que te pones como loca
cuando mis manos te tocan
y mis besos te provocan
una y otra fantasía.
Eres tú la que me llama y
dices que me necesita
aunque siempre llegas,
te hago terminar mansita
pues te doy lo que te gusta
hasta que dobla las manitas.
Y voy a seguir pecando con tu cuerpo
mamacita, mientras tu me lo permitas.
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Ahí vas con el mismo cuento
que no te dedico tiempo,
que nomas te busco cuando
tengo ganas de tu cuerpo,
que quisieras olvidarme,
pero sabes que nadie
podrá superar mis besos.
Dices que no te quiero
mientras por ti me muero
pero no puedo hacer pues
ella llego primero, tú bien sabes
que te adoro no puedes culparme solo
de algo que los dos sabemos.
Que no llegamos ni a la cama
cuando rompes mi camisa
pues ya no aguantas las ganas
de que yo te de caricias.
Que te pones como loca
cuando mis manos te tocan
y mis besos te provocan
una y otra fantasía.
Eres tú la que me llama y
dices que me necesita
aunque siempre llegas,
te hago terminar mansita
pues te doy lo que te gusta
hasta que dobla las manitas.
Y voy a seguir pecando con tu cuerpo
mamacita, mientras tu me lo permitas.
Que no llegamos ni a la cama
cuando rompes mi camisa
pues ya no aguantas las ganas
de que yo te de caricias.
Que te pones como loca
cuando mis manos te tocan
y mis besos te provocan
una y otra fantasía.
Eres tú la que me llama y
dices que me necesita
aunque siempre llegas,
te hago terminar mansita
pues te doy lo que te gusta
hasta que dobla las manitas.
Y voy a seguir pecando con tu cuerpo
mamacita, mientras tu me lo permitas.